Un estudio dirigido por Hurí Hasson del Princeton University y publicado sobre la revista de la academia americana de las Ciencias PNAS revela que cuando dos personas se hablan sus cerebros casi se unen presentando una actividad neural muy parecida. Hasta cuando el oyente entiende al vuelo lo que el otro está diciéndole, su mente está capaz de adelantarlo, en efecto la actividad de su cerebro adelanta aquel de su interlocutor.
La capacidad de entender las intenciones y los sentimientos ajenos sin que lo otro diga nada es un poder que llamamos "empatía." Ésta es posible gracias a una clase de células nerviosas, las neuronas reflejo, que "imitan" a la persona frente a nosotros. El estudio EE.UU. parece sugierir que un tipo de "empatía" de las palabras también se desarrolla cuando dos personas se hablan ayudándose a comprenderse. Los científicos han estudiado con la resonancia magnética el cerebro de dos individuos que se hablan, registrando la actividad neural de los dos.
Has emergido que durante la conversación, "las respuestas neurales que hemos registrado en el cerebro del que habla - Hasson explica - también son visibles en el cerebro del oyente durante la comprensión de lo que siente. Eso significa que los cerebros del oyente y de la persona que habla enseñan una actividad parecida, son "unidos", durante la conversación y que, más fuerte es este parecido, mayor es el grado de comprensión de parte del oyente."
"Mientras una persona cuenta una historia a su interlocutor - el otro autor del trabajo Greg Stephen explica - las áreas neurales activas en el cerebro de los dos son las mismas y enseñan una dinámica parecida durante toda la conversación."
"El acoplamiento de las dos mentes, por lo tanto, desenvuelve en el tiempo. Y casi siempre las respuestas neurales del cerebro del oyente llegan con un poco de retraso con respecto a las respuestas correspondientes en el cerebro del que habla, como si el cerebro de este último, hablando, diera forma a las respuestas neurales de su oyente."
"Además también hemos encontrado algunas áreas del cerebro en que las respuestas del oyente preceden aquellos de quien le habla - Hasson añade. Probablemente se trata de respuestas anticipatorie gracias a los que el oyente predice lo que su interlocutor está a punto de decirle. También en este caso mayor es el acoplamiento mental entre los dos, mejor y el grado de comprensión."
Este estudio demuestra por lo tanto que, cuando no entendemos a alguien, podría ser que nuestras mentes no se encuentran y no hacen click para ir al unísono.
