Efe/InfoCatólica) El Primado de la Iglesia Católica en Bélgica ofreció ayer una conferencia de prensa para intentar frenar la polémica generada, que le ha valido duras críticas de organizaciones sociales y de responsables políticos de las cuatro esquinas del país. Mons. Leonard explicó, como comparación que, en su opinión, si alguien fuma o se bebe alcohol de forma exagerada se puede adquirir cáncer, lo que también sería "una forma de justicia inmanente".
"Hay consecuencias derivadas de nuestros actos", insistió el arzobispo, quien también apuntó a que en el libro hay otra frase suya que reza que las personas con sida "merecen todo el respeto y no deben ser objeto de discriminación". El prelado insistió en que sus manifestaciones son "honorables y respetables". En cambio, algunas de las reacciones de responsables políticos las califican de "innobles", "nauseabundas" u "homófobas".
El arzobispo también recordó que el libro en cuestión -una actualización en lengua flamenca de la obra "Monseñor Leonard: Conversaciones"- fue publicada en francés en 2006, cuando él era solamente obispo de Namur, y que entonces no hubo reacciones negativas. "Hace cuatro años que el libro apareció sin que generara emociones", lamentó Mons. Leonard, de 70 años.