(Efe/InfoCatólica) Los medios de comunicación brasileños aseguran que, además por las denuncias de corrupción, la candidata del PT no obtuvo la mayoría absoluta en la primera vuelta por su postura ante el aborto, a pesar del cambio que mostró a última hora. Tercera fue la candidata del Partido Verde (PV), Marina Silva, que obtuvo el 19,53% de los votos, un resultado que supera las proyecciones más optimistas de las encuestas sobre intención de voto de la aspirante de los verdes y que la convierte en el fiel de la balanza para la segunda vuelta.
Si Silva estuvo por encima de lo que le habían vaticinado las encuestas, no puede decirse lo mismo de Rousseff, apadrinada por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, y quien según los últimos sondeos obtendría entre el 50 y el 51% de los votos válidos, pero finalmente se quedó unos cinco puntos por debajo. Hasta hace dos semanas, la opción de voto por Rousseff era del 57% de los votos válidos (excluidos los en blanco y los nulos), que le alcanzarían para ganar la Presidencia en la primera vuelta, pero en la recta final de la campaña su candidatura perdió fuerza por las denuncias de corrupción en el Gobierno y por las versiones sobre su supuesto apoyo al aborto.
Una encuesta divulgada el viernes por el instituto Ibope mostró que en las dos últimas semanas Rousseff perdió siete puntos porcentuales entre los evangélicos por su posición frente al aborto. Para contrarrestar ese efecto negativo, Rousseff se reunió hace cuatro días con líderes evangélicos en Brasilia y asistió el pasado jueves al bautismo de su primer nieto en una iglesia de Porto Alegre.